Ademas de la muñeca Anabelle, la casa de la famosa pareja de investigadores de lo paranormal está llena de una serie de artículos que no a todo el mundo le gustaría tener en su sotano.
Pero ¿Qué pensarías si lo menos espeluznante que hay en esta casa son cráneos humanos y reliquias malditas?
5. El Espejo de Myrtles Plantation
La plantación de Myrtles se cree que es una de las casas más embrujadas de Estados Unidos. Y no es algo difícil de creer, puesto a que el mito de que las estructuras malditas han sido construidas sobre cementerios indígenas se lo debemos a esta casa.
También fue hogar al menos diez asesinatos y sucesos paranormales ocurridos a los huéspedes posteriores a su construcción. Pero, sobre todo, unos relacionados con el espejo que hoy habita en el museo Warren.
Dicen que en el espejo están los espíritus de una mujer y sus hijos, que fueron envenenados en la finca. Y muchos aseguran que es posible ver figuras que salen de él y huellas de manos infantiles impresas en el cristal.
4. El Vestido de Anna
Este vestido pertenecía a Anna Baker en 1849, una joven adinerada que se enamoró de un trabajador de clase baja. Lo cual su padre reprochó, no solamente prohibiéndole casarse sino desterrándola de su ciudad natal.
Anna, quien ya había comprado su vestido, murió enfadada y soltera años después. Así que el vestido fue a parar bajo muchas manos hasta que se volvió parte del museo Baker. Donde se notó que parecía poder moverse, a pesar de que estaba encerrado en una caja de cristal.
Claramente, un objeto lleno de misterio y tanto resentimiento debía estar en la posesión de los Warren.
3. El Órgano del Terror
Es común ver en las películas de terror un órgano o piano paranormal que se toca solo. Pero fue la realidad la que inspiró esta tendencia, y la puedes encontrar en el museo Warren.
Se desconoce mucho de la familia a la que le perteneció este tétrico instrumento musical. Pero la pareja de investigadores de lo paranormal aseguraba que el testimonio de los dueños originales era verídico.
Puesto que parecían muy atormentados con la idea de que el órgano sonara solo como si alguien estuviera tocándolo. Parece muy adecuado que esté en la sección de “Espíritus sin descanso” del museo.
2. Una piedra de la Rectoría de Borley
Este pedazo de construcción perteneció a la Rectoría de Borley, considerada como la mansión más embrujada de Inglaterra. Y que fue destruida por un incendio en 1939, por lo que esta piedra es uno de los pocos recuerdos que quedan de la casa.
Los fenómenos paranormales que ocurrían en la mansión comenzaron siendo pasos inexplicables en el interior de la casa. Y cuando se convirtió en rectoría en el siglo 20, algunas de las hijas del rector decían haber visto el fantasma de una monja.
Además de los muchos avistamientos inexplicables de un carruaje fantasma impulsado por jinetes sin cabeza. Por suerte, nadie ha intentado habitar esta mansión luego de ser incendiada.
1. La Muñeca de las Sombras
Si pensabas que Anabelle es la única muñeca macabra que está en la casa Warren, te equivocas. Puesto que la Muñeca de las Sombras a simple vista puede parecer muy aterradora.
Pero su apariencia no es nada comparado con que los Warren aseguraban que esta muñeca fue hecha con huesos humanos y huesos de animales.
Los antiguos dueños de esta muñeca fueron atormentados por ella, ya que las leyendas dicen que es capaz de visitarte en tus sueños y detener tu corazón mientras duermes.
Sabiendo esto ¿Te atreverías a visitar el museo Warren?
